El té se considera mucho más que una simple infusión, en muchos países y culturas el té es todo un arte y una tradición ancestral, siendo “la ceremonia del té” un auténtico ritual.
La Camelia sinensis es la planta primigenia del té y, según se procese, da como resultado sus diferentes tipos. Esta planta es nativa de regiones tropicales de Asia, como China, India, Sri Lanka, Japón y otros países del sudeste asiático. Su variedad de notas abarca desde delicadas notas florales a otras robustas y más terrosas.
Su uso es bastante frecuente en la perfumería actual y, según la variedad, el té verde es perfecto para combinar con notas frescas, el rojo con las cálidas, el blanco con notas delicadas o florales y el té negro con notas amaderadas.
En China, Japón y Marruecos, entre muchos otros, hay una relación entre el té y una forma de entender el bienestar físico, mental y espiritual, de sentarse en torno a la mesa y de compartir. En la actualidad se consume en todo el mundo con una amplia variedad de tipos, sabores y tradiciones asociadas…Además, en algunas culturas lo relacionan con poderes curativos y, en China, por ejemplo, se creía que el té podía salvar de un envenenamiento. El té es todo un arte y una tradición ancestral
