CÓMO ELEGIR UN PERFUME

trucos de aplicación y conservación de las fragancias

La gran creatividad del mercado de perfumes y la enorme variedad de fragancias que se crean cada año hacen que tengamos a nuestro alcance un extenso abanico de alternativas.

Desde fragancias cristalinas y vibrantes a perfumes sensuales, amaderados u orientales, pasando por florales y tantas otras posibilidades seguro que propician que encontremos ese perfume único y especial que estamos buscando, hecho para nosotros.

Hay quien prefiere probar lo último del mercado y, teniendo en cuenta el gran ritmo de creación de los perfumistas y de las diferentes firmas, siempre va a existir una buena lista de opciones por probar. Hay quien prefiere bucear entre perfumes clásicos o icónicos que llevan un tiempo en el mercado. Todas las opciones son válidas.

Si tienes un gusto determinado por fragancias que tienen ciertas notas en común, puedes empezar documentándote sobre cuál es su familia olfativa y cuáles son esos ingredientes que te fascinan para enfocar tu selección en perfumes que sigan esa línea olfativa. Aunque se enmarquen en una familia o clasificación similar, te puede atraer probar esas notas principales con otras combinaciones o bien probar notas similares con nuevos matices. Las consejeras de perfume de punto de venta son expertas formadas para este propósito que pueden ser de ayuda y orientación.

Además del olor, es importante que el carácter y personalidad de la fragancia encajen con lo que estás buscando y te trasladen a un mundo de evocación de las emociones que deseas conseguir. No es lo mismo buscar una fragancia sensual y seductora para momentos íntimos que una fragancia que te aporte una dosis de empoderamiento en tus retos profesionales u otra que te haga sentir esa sensación reconfortante de paz y armonía que buscas para los momentos de descanso.

Cada fragancia es única y transmite emociones únicas en base a lo que cada persona ha vivido y sus experiencias positivas o negativas en torno a diferentes ingredientes presentes en situaciones a lo largo de su vida.

Hoy en día hay grandes facilidades para una primera prueba de producto, hay firmas que ofrecen la posibilidad de pedir una muestra por internet y también hay diferentes tipos de pruebas olfativas en revistas: desde secantes creativos, scented strips, liqua touch, mini vaporizadores insertados en sus páginas o incluso sofilux. Y, por supuesto, el punto de venta, donde vamos a poder probar una variedad de opciones y comparar unas con otras.

10 tips para catar y elegir tu perfume

  • No perfumarse previamente
    Es importante no perfumarse previamente para no mezclar distintos olores que puedan interferir en la percepción. A algunas personas les cuesta salir de casa sin perfumarse, pero es la mejor forma de tener un punto de partida lo más neutral posible.

  • Selecciona las fragancias
    Haz una pequeña selección de las fragancias que más te atraigan para probarlas en una «mouillette, «blotter” o tira olfativa.

 

  • Vaporiza a unos 20cm. de distancia

    Huele cada mouillette a unos 2 cm. de distancia de la nariz. Es importante que no roce la nariz para que no se quede ningún olor impregnado y así poder probar el siguiente de forma neutral.

  • Coloca las muestras formando un abanico
    Cuando tengas varias muestras, colócalas en forma de abanico para ir comparando una con otra. Puedes escribir el nombre de cada fragancia en la mouillette para acordarte.

  • Recalibra tu olfato
    Si tu nariz se ha saturado y necesitas recalibrar el olfato, hay quien recomienda granos de café, pero es tan fácil como oler tu propia piel en la parte interna del codo.

  • Prueba en tu piel
    Cuando ya tienes tu selección muy acotada, ha llegado el momento de la prueba en piel. Vaporiza sobre la cara interna de la muñeca a unos 20 cm. de distancia, con cuidado de que no haya nada detrás.

  • No frotes las muñecas
    Es importante no frotar las muñecas, este gesto tan habitual y socorrido podríamos decir que “rompe” las notas. No es lo correcto para permitir el desarrollo de la fragancia siguiendo sus tempos.

  • Vuelve a olerlo pasado un tiempo
    Tras el impacto inicial en el que se aprecian las notas de salida, las más volátiles, conviene volver a olerlo pasado un tiempo para ver cómo se desarrolla y captar nuevos matices de las notas de corazón y de fondo y así tener la percepción de cómo quedará finalmente en tu piel. La fragancia sigue una estructura en forma de pirámide olfativa en la que unas notas van dando paso a otras y puede ocurrir que una salida que no te entusiasmaba evoluciona de una forma que finalmente te encanta.

  • Déjate llevar por la fragancia
    ¿Ya te has decidido? Inhala profundamente y déjate llevar. Puedes cerrar los ojos y pensar las sensaciones que te transmite, recuerdos o ensoñaciones de momentos futuros. Cada perfume huele diferente en cada persona por múltiples factores: el pH de cada piel, la temperatura o incluso la alimentación. Hazlo tuyo y siente que en ti huele de forma única e irrepetible.

  • Un perfume para cada situación

    Juega con diferentes perfumes para diferentes momentos. Hay momentos de seriedad y momentos de travesuras, momentos de acción y momentos de tranquilidad, momentos de seducción, momentos de venirte arriba y empoderamiento… Cada perfume es un aliado para cada tipo de situación, para acompañarte en los momentos más importantes de tu vida.

    Ya has hecho tu elección, ¡enhorabuena! Ha llegado el siguiente paso.

Trucos de aplicación del perfume

  • Vaporizar en puntos estratégicos
    Lo ideal es vaporizarlo en aquellos puntos “estratégicos” de nuestro cuerpo, coincidiendo con las zonas pulsátiles. Estas zonas son aquellas en las que hay pulso, es decir, donde mejor se percibe nuestra frecuencia cardíaca. La razón principal es que esas pequeñas vibraciones de nuestro pulso facilitan que se liberen las moléculas olfativas de forma progresiva, con el objetivo de que se prolongue su efecto y potencie la presencia del perfume en nuestra piel.

  • Los puntos clave
    Te damos más pistas. Esos puntos estratégicos son zonas como detrás de las orejas, la parte interna de las muñecas, el escote, los tobillos o detrás de las rodillas. Algunas de ellas pueden resultar muy sensuales en las distancias cortas.

  • Deja huella
    Si lo que te gusta es dejar una estela tras tu paso, puedes perfumarte en la zona de la nuca, así conseguimos mantener la huella que deja nuestra fragancia detrás de nosotros.

  • Un paso de baile bajo la lluvia atomizada de tu fragancia…
    En lugar de aplicarla sobre zonas concretas, ¿has probado a antes de vestirte, vaporizar en el aire y colocarte debajo, acentuando el momento con un giro como si fuera un paso de baile, para que se deposite suavemente sobre tu cuerpo? Puedes cerrar los ojos modo “ensoñación” y así evitas que penetre en los mismos mientras imaginas una escena de película.

  • Ten en cuenta la intensidad de tu fragancia
    No es lo mismo eau de toilette que un extracto o parfum. Y no es lo mismo una fragancia cítrica, más volátil, que otras amaderadas o especiadas. El sillage es un término de origen francés, que significa estela, que se refiere a la capacidad de ciertas notas olfativas de dejarse notar y sentir en un perfume. Si es potente, bastará con una aplicación más tenue porque su efecto se hará notar fácilmente y no será necesario repetir la aplicación a lo largo del día.

  • Duración de la fragancia
    En ocasiones tenemos la falsa sensación de menor duración de la real de nuestra fragancia. Esto sucede porque nuestra nariz se ha acostumbrado. Siempre puedes preguntar a una persona de confianza para tener una idea de la duración real antes de volver a aplicar. Y no siempre sucede, es cierto que hay notas olfativas que son más volátiles y requieren mayor repetición de aplicaciones.

  • Complementos de la fragancia
    Muchas fragancias ofrecen, además del perfume, los complementos perfumados como gel de ducha o body milk. Son una buena estrategia para no mezclar olores de diferentes productos y, por ejemplo, un body milk aplicado al salir de la ducha ayudara a “sellar” más tiempo de tu fragancia sobre la piel.

  • Evita la exposición al sol
    Evita vaporizar el perfume en zonas exteriores y expuestas al sol.

La conservación del perfume

Para terminar, es importante conocer la mejor manera de conservar nuestro preciado perfume. Hay que tener en cuenta que se envasa en una botella herméticamente cerrada. El único proceso que podría afectarle sería la oxidación, por lo que si se mantiene sin uso tiene una larga conservación.

Una vez en uso, el oxígeno va sustituyendo al líquido que se ha consumido y la oxidación irá avanzando. El tiempo de uso recomendado depende del tipo de perfume y de los ingredientes que lo componen, por lo que no hay una fórmula estándar aplicable.

Algunas fragancias tienen un elevado número de componentes: hay fórmulas con cuarenta pero otros perfumes pueden tener hasta doscientos.

Si el criterio de uso personal es el de la popular frase «me lo guardo para ocasiones especiales», es interesante crear las condiciones para que una ocasión sea especial con la máxima frecuencia posible. El perfume podría guardarse, pero, una vez abierto, cualquier excusa es buena para utilizarlo y así utilizarlo en condiciones óptimas.

Si conservamos el perfume a baja temperatura se puede retrasar el proceso de degradación. En un mundo ideal podríamos pensar en que tuviera su propia nevera, como los buenos vinos, pero no está al alcance de cualquiera. Y, si pensamos en la nevera de la cocina, quizás no sea muy apetecible encontrar tu perfume mezclado con los alimentos… Eso sí, pensemos en el lugar más adecuado dentro de nuestras opciones. Aunque es muy habitual tenerlo en el cuarto de baño, los cambios de temperatura y el vapor caliente de la ducha no es lo más adecuado para su conservación, tenlo en cuenta, así como que no reciba luz directa.

Esperamos que estos consejos te ayuden en la selección de tu perfume, para aplicarlo potenciando el mundo de sensaciones que nos hace sentir y, finalmente, cómo conservarlo para optimizar su uso en las mejores condiciones. Ahora sólo queda disfrutarlo al máximo.