El nombre de Neroli tiene su origen en la noble francesa Marie-Anne de la Trémoille (1642-1722), duquesa de Bracciano y princesa de Nerola, que puso de moda el olor de la flor del naranjo.
Nombrada Camarera mayor de palacio de la corte de Felipe V de España, la princesa de Nerola tenía el encargo de velar por los intereses de Francia en la península. Con gran habilidad y discreción, sus manejos e intrigas ejercieron un papel clave en los negocios de estado y la política de la época.
Fue una gran influencia en los foros aristocráticos, trascendiendo sus preferencias en cuanto a perfumes entre la nobleza. Tanto es así que se llegó a otorgar su nombre a un extracto natural.