¿Sabrías decirnos de dónde se obtiene la trementina…? ¡Se trata de un líquido incoloro que proviene de la destilación de la resina de distintos tipos de árboles!
La trementina común se obtiene al destilar la resina de los pinos, pero hay otros tipos, como la trementina de Venecia, que procede de los lárices y es más transparente y olorosa que la común.
También existe la trementina de Quíos, que era muy apreciada en la antigüedad sus propiedades aromáticas y medicinales, o la trementina de Estrasburgo que se compone de resina extraída del abeto siberiano.
Uno de los usos más característicos de la trementina es con la pintura, tanto por su poder disolvente y diluyente como por su capacidad para limpiar pinceles, espátulas y paletas manchadas de pintura al óleo.
Y, ¿sabías que el Museo del Prado, en la exposición «El Taller de Rubens» ha recreado su olor? Te invitamos a leer nuestra noticia y descubrirlo.