Palacio Indio con jazmines y palmeras de fondo. Leyenda sobre el jazmín.
El jazmín en la India

Existen numerosas leyendas e historias de amor acerca de la milenaria flor del jazmín. Una de las más conocidas la sitúa en tiempos lejanos, en la India. Allí una princesa hindú se enamoró del dios del Sol, Surya Deva.

A pesar de su belleza, su amor no era correspondido y el rechazo la sumió en una profunda melancolía y se quitó la vida.

Para conmemorar a la princesa, la corte decidió esparcir sus cenizas por la montaña donde paseaba y se había enamorado del dios Sol. De las cenizas surgieron unas plantas con unos delgados y esbeltos tallos verdes salpicados de pequeñas flores blancas… Curiosamente, estas flores permanecían cerradas durante el día y abrían para exhalar un profundo y embriagador olor solo por la noche… Justo cuando el sol se retiraba, para que este no las pudiera disfrutar.

Desde ese momento, se nombró a esa nueva, delicada y extraña flor, “jazmín”, que además se convirtió en la flor sagrada del dios hindú del amor, Kama.

 

El jazmín en la India, una leyenda de amor perfumada

El jazmín en la India una leyenda de amor perfumada

Existen numerosas leyendas e historias de amor acerca de la milenaria flor del jazmín. Una de las más conocidas la sitúa en tiempos lejanos, en la India. Allí una princesa hindú se enamoró del dios del Sol, Surya Deva.

A pesar de su belleza, su amor no era correspondido y el rechazo la sumió en una profunda melancolía y se quitó la vida. 

Para conmemorar a la princesa, la corte decidió esparcir sus cenizas por la montaña donde paseaba y se había enamorado del dios Sol. De las cenizas surgieron unas plantas con unos delgados y esbeltos tallos verdes salpicados de pequeñas flores blancas… Curiosamente, estas flores permanecían cerradas durante el día y abrían para exhalar un profundo y embriagador olor solo por la noche… Justo cuando el sol se retiraba, para que este no las pudiera disfrutar.