Tomillo
Existen más de 350 especies, siendo uno de los más comunes en perfumería el Thymus vulgaris. Se trata de un arbusto que crece entre 10 cm y 30 cm de alto, en el Mediterráneo Occidental, África y Oriente Medio, normalmente en regiones secas y soleadas.
¿Sabías que España es líder mundial de producción de tomillo de diferentes variedades? Y, concretamente, el tomillo rojo o Thymus Zygis es característico de España.
El aceite esencial se obtiene destilando las hojas. Se trata de una nota muy difusiva, herbal, verde y fresca cálida, con facetas alcanforadas. Combina a la perfección con notas amaderadas, fougère y Chipre y suele estar presente en aguas de colonia frescas y herbales.
En gastronomía, pertenece al grupo de especias conocidas como “Hierbas provenzales” o “Hierbas mediterráneas” muy utilizadas para sazonar.
El origen y usos del tomillo se remonta al Antiguo Egipto. Se usaba como ungüento en embalsamamientos y se quemaba como purificador del aire durante las epidemias. Posteriormente, griegos y romanos lo empleaban como fragancia en sus baños. En la Edad Media, las damas tejían ramilletes de tomillo en prendas que regalaban a los caballeros de las Cruzadas para darles suerte en la batalla, lo que llevó a asociarlo como símbolo de valentía.