Charla Estée Lauder: un legado de belleza

Mujer visionaria, un legado de belleza

Un fascinante recorrido en el tiempo de la mano de “la gran dama de la cosmética”, Estée Lauder, mujer visionaria que demostró que todo era posible si lo soñabas y tenías el suficiente valor para perseguirlo. Esta mujer emprendedora, adelantada a su tiempo en todos los sentidos, creó y dirigió una de las empresas más prestigiosas e innovadoras del mundo, que este año celebra su 75 aniversario, creyendo firmemente en el poder de la belleza.

Conoceremos más en profundidad a una mujer cuya filosofía estaba basada en la perseverancia, pues, tal y como ella decía, nunca soñó con el éxito, sino que trabajó para llegar a él. Descubriremos los orígenes de Josephine Esther Mentzer, como se llamaba en realidad, cómo a su corta edad se despertó su interés por la belleza y qué supuso la figura de su tío en su vida.

Averiguaremos cómo fue su primera incursión en el mundo de los negocios, cómo sus ungüentos vieron primero la luz en los fogones de su hogar para luego comercializarlos en un salón de belleza y con qué cuatro productos puso en marcha su empresa bajo una sencilla premisa que la acompañaría toda la vida: cualquier mujer puede ser hermosa.

Entenderemos la importancia del “boca a boca”, clave en sus inicios. Su lema, repetido como un mantra, era “Teléfono, telégrafo, cuéntaselo a una mujer”, pues tenía probado que las mujeres que compraban sus productos darían a conocer su marca.

Mujer visionaria, no solo se preocupaba por el producto final, sino también por lo que entendemos en la actualidad como ”marketing”, popularizando el reparto de muestras gratuitas, la promoción del regalo con compra o el famoso “mailing”.

Pionera en cuidado de la piel, también tenía una maravillosa “nariz” y veremos cómo fue su primer contacto con el mundo del perfume gracias a su aceite de baño perfumado Youth-Dew, que supuso la democratización del uso de fragancias de la época. Lo tenía claro: quería que el perfume fuera un complemento más del día a día. Veremos también el porqué del color turquesa pálido del frasco de este icónico producto y qué significado tenía para ella.

Consciente de la importancia de la accesibilidad de sus productos, se dio cuenta de la importancia de la exclusividad, lo que nos lleva a descubrir la estrecha relación que mantenía con Grace Kelly o la esposa de Aga Khan, a quienes les dedicó un perfume, Private Colecction, «solo para unas poquísimas amigas suyas».

Descubriremos también su línea de perfumes sólidos y la revolución que supuso para la compañía, quien cuenta con más de 1.700 ejemplares en la actualidad.

Agradecemos a Estée Lauder y a Paula Marcos, Formadora en España y Portugal de la compañía, esta maravillosa presentación que desgrana muchas curiosidades de este legado de belleza que, aún en la actualidad, late con tanta fuerza.

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